Viajar es poner el contador a cero. Volver a empezar. Es desconectar de tu realidad para darte de bruces con la vida real.
Viajar es marcharse y hacer del mundo tu casa. Tu hogar. En confiar en desconocidos. Tenderles la mano. Es dejarse llevar.
Es un reencuentro y también una despedida. Es aprender a bailar con zapatos nuevos. Sentir que empiezas a volar.
Viajar es descubrir que la persona que conocías ya no está. Es creerse poeta, fotógrafo…eterno soñador. Es sentirse pequeño y grande a la vez.
Viajar te lanza una flecha directa a tus entrañas. A lo más profundo de tu ser. Dejando cicatrices. Tatuajes grabados en tu piel.
Viajar es aprendizaje. Inspiración. Es terapia para el alma y el corazón.
Viajar es robarle tiempo al tiempo. Es convertir lo temporal en eterno.